El 22 de noviembre, el fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, anunció la devolución de antigüedades por un valor cercano a los 500,000 dólares a México. Los 30 objetos fueron confiscados como parte de una serie de investigaciones sobre saqueo y tráfico llevadas a cabo por la Oficina del Fiscal, e incluyen una variedad de artefactos mesoamericanos relacionados con el culto, la guerra y los juegos. Fueron introducidos de contrabando en EE. UU. por traficantes que lavaron las antigüedades mediante falsos orígenes y tasaciones.
Dentro del lote se encuentra un yugo de juego de pelota de piedra (300-600 d.C.), una representación ceremonial de una pelota usada en uno de los primeros ejemplos registrados de un juego de pelota. Probablemente se utilizaba como trofeo o parte de una ceremonia. Yugo de piedra como este se ha encontrado en tumbas de entierro, lo que lleva a los historiadores a creer que eran símbolos de estatus.
También forma parte del botín una figura de Xipe Totec, que representa al dios azteca de la agricultura y la guerra. Otras dos piezas, una serpiente emplumada hecha de piedra y una tortuga antropomórfica, representan dos fases de la deidad creadora azteca Quetzalcóatl. Su forma de serpiente emplumada se ve a menudo en la arquitectura azteca, mientras que su forma humana, Ehecatl, es representada aquí como una tortuga con rostro humano.
“Las piezas que se devuelven hoy reflejan la profundidad y la belleza de este antiguo patrimonio cultural”, declaró Bragg en un comunicado. “Desafortunadamente, aún hay muchas más piezas saqueadas de México que siguen en galerías, hogares y casas de subastas, y continuaremos localizándolas.”
En un comunicado, el cónsul general interino de México, Joaquín Pastrana Uranga, señaló: “La repatriación de estos artefactos representa un compromiso profundo con la justicia y la preservación cultural. Cada pieza es parte de la historia y la identidad de México, y su regreso inspirará a las futuras generaciones.”
Durante su mandato como fiscal de distrito de Manhattan, la Unidad de Tráfico de Antigüedades de su oficina ha recuperado casi 2,100 antigüedades de 39 países por un valor de 250 millones de dólares.