El 2025 será recordado como uno de los años más violentos en la historia reciente de México. Aunque las cifras oficiales de homicidios mostraron una ligera reducción, la brutalidad y sofisticación de los crímenes alcanzaron niveles sin precedentes.
Desde el descubrimiento de campos de exterminio hasta asesinatos de funcionarios públicos en plena luz del día, estos eventos marcaron la agenda de seguridad nacional y dejaron claro que México enfrenta una crisis de violencia que va mucho más allá de las estadísticas.
El Contexto de 2025
En el primer semestre de 2025 se registraron al menos 2,517 crímenes de extrema violencia en México, clasificados como atrocidades por la organización Causa en Común. Esto representó un promedio de 14 atrocidades por día, incluyendo asesinatos con tortura, mutilaciones, descuartizamientos, masacres y ataques contra autoridades.
La fragmentación del Cártel de Sinaloa, con las facciones de Los Chapitos y La Mayiza enfrentadas, y la guerra entre el CJNG y otros grupos criminales mantuvieron a estados como Jalisco, Guanajuato, Michoacán, Sinaloa e Hidalgo en niveles críticos de violencia. Ni siquiera la Ciudad de México estuvo exenta.
1. El Rancho Izaguirre: El ‘Auschwitz Mexicano’
El 5 de marzo de 2025, el colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco ingresó al Rancho Izaguirre en Teuchitlán, tras una llamada anónima. Lo que encontraron fue una escena de horror comparable con los peores crímenes contra la humanidad: tres crematorios con restos humanos calcinados, montañas de ropa, más de 400 pares de zapatos, objetos personales, mochilas, libretas y un altar a la Santa Muerte.
El sitio, ubicado a una hora de Guadalajara en una zona agrícola, habría sido utilizado por el Cártel Jalisco Nueva Generación como centro de reclutamiento, entrenamiento y exterminio. Jóvenes eran atraídos con falsas ofertas de trabajo, despojados de sus teléfonos, forzados a grabar videos de adhesión al cartel y sometidos a violencia extrema.
Las imágenes del lugar fueron comparadas con campos de concentración nazis, lo que le valió el sobrenombre de “el Auschwitz mexicano”. Medios internacionales como The Washington Post y Los Angeles Times utilizaron este término, aunque el párroco local y algunas expertas señalaron que la comparación podía ser inexacta.
Lo más perturbador del caso fue que la Fiscalía de Jalisco había revisado el rancho en septiembre de 2024 tras un enfrentamiento, deteniendo a diez personas y hallando un cadáver, pero calificó el incidente como “no relevante”. Esta omisión reveló negligencia institucional y generó protestas masivas.
La Comisión contra la Desaparición Forzada de la ONU emitió medidas cautelares para proteger a los colectivos y garantizar la investigación. El hallazgo tuvo un millón 100 mil menciones en redes sociales con un alcance potencial de mil 280 millones de personas, convirtiéndose en uno de los casos más impactantes desde Ayotzinapa en 2014.
2. El Coche Bomba de Coahuayana
El 6 de diciembre de 2025, alrededor de las 11:40 horas, una camioneta Dakota negra explotó frente a las instalaciones de la Policía Comunitaria de Coahuayana, Michoacán, a menos de cien metros de la alcaldía municipal. La explosión dejó seis personas muertas, incluyendo tres policías comunitarios, dos civiles y el conductor del vehículo, además de 12 heridos.
Los explosivos estaban ocultos bajo costales de plátano en la cajuela de la camioneta. La explosión fue tan potente que dañó al menos diez inmuebles, varios locales comerciales y una decena de vehículos estacionados en un radio de 300 metros. El ataque causó severos daños en la fachada de la estación policial y afectó el servicio eléctrico del poblado.
La Fiscalía de Michoacán rastreó la ruta del vehículo: ingresó al estado procedente de Colima a las 8:30 de la mañana por la carretera 200, avanzó hacia la comunidad de San Vicente, y finalmente llegó a Coahuayana donde ocurrió la explosión.
La FGR inicialmente anunció que investigaría el caso como terrorismo, pero al día siguiente corrigió que se trataba de delincuencia organizada. El ataque fue atribuido al CJNG en el contexto de la confrontación con las Policías Comunitarias por el control de las rutas de tráfico de cocaína desde Sudamérica.
Este fue uno de los pocos ataques con coche bomba en la historia reciente de México, recordando casos previos como el de 1984 contra Palacio Nacional. Especialistas en seguridad han documentado solo 20 atentados con coches bomba en México de 1994 a 2025.
3. Asesinato del Alcalde Carlos Manzo
El 1 de noviembre de 2025, Carlos Manzo, alcalde de Uruapan, Michoacán, fue asesinado durante un evento de Día de Muertos. Manzo, un político independiente, fue baleado en pleno acto público, convirtiéndose en uno de los 56 funcionarios públicos asesinados en 2025 según Causa en Común, incluyendo siete alcaldes.
Días antes de su muerte, Manzo había solicitado a la administración federal no retirar la presencia de 200 elementos de la Guardia Nacional, advirtiendo que “esta decisión deja a Uruapan en estado vulnerable ante las actividades ilícitas del crimen organizado”. Presuntamente, el CJNG había ofrecido dos millones de pesos por su cabeza.
Su asesinato desató marchas para exigir justicia, paz y alto a la violencia en México, incluyendo la llamada movilización de la “Generación Z” en la Ciudad de México. Siete escoltas fueron detenidos por su posible relación con el homicidio.
El caso llevó al gobierno de Claudia Sheinbaum a anunciar el Plan Michoacán, una estrategia de seguridad con 57 millones de pesos de inversión para frenar la violencia en el estado.
4. Emboscada a Funcionarios de Brugada
El 20 de mayo de 2025, Ximena Guzmán, secretaria particular de la jefa de Gobierno de la CDMX, Clara Brugada, y José Muñoz, coordinador de asesores, fueron emboscados y asesinados a balazos en la Calzada de Tlalpan. Al menos dos vehículos y una motocicleta participaron en el ataque.
La forma en que fueron ejecutados, con técnica quirúrgica y logística precisa, sugirió un crimen que no buscaba solo eliminar, sino enviar un mensaje. El caso expuso la vulnerabilidad de funcionarios de alto nivel incluso en la capital del país y abrió interrogantes sobre posibles vínculos con grupos criminales.
5. Extradición Masiva de Capos
El 27 de febrero de 2025, México entregó a Estados Unidos a 29 narcotraficantes de alto perfil, incluyendo a Rafael Caro Quintero, los hermanos Treviño Morales de Los Zetas, Antonio Oseguera Cervantes (hermano del líder del CJNG), y Vicente Carrillo del Cártel de Juárez.
El 12 de agosto se concretó una segunda ronda con otros 26 capos, elevando el total anual a 55 líderes criminales extraditados. Esta estrategia, presentada como parte de la Ley de Seguridad Nacional, representó un cambio significativo en la política de cooperación con Estados Unidos.
6. La Crisis de Desapariciones Alcanza 131,000 Casos
En 2025, las desapariciones aumentaron 12% con cifra superior a 131,000 casos acumulados. Durante el primer año de Sheinbaum, el número se disparó 74% respecto al mismo periodo de AMLO, pasando de 9,114 a 15,855 casos.
La Ciudad de México reportó 1,306 personas desaparecidas entre enero y julio de 2025, ocupando el primer lugar nacional. Este incremento sugiere deterioro en las capacidades de las fiscalías y recrudecimiento del conflicto entre grupos criminales.
7. Sinaloa en Llamas por Guerra Interna
La fragmentación del Cártel de Sinaloa entre Los Chapitos y La Mayiza provocó que el estado registrara 54 eventos de violencia homicida por cada 100 mil habitantes, un incremento del 67.2% frente a 2024, la tasa más alta a nivel nacional.
La guerra interna generó más de 1,500 homicidios dolosos en Sinaloa y se extendió a Durango y Chihuahua en la región de la Sierra Madre Occidental. Bloqueos, enfrentamientos armados y desplazamientos forzados fueron constantes durante todo el año.
8. Récord de Extorsión en Múltiples Estados
La extorsión incrementó de forma alarmante en entidades como Tamaulipas con 158.7%, Puebla con 105% y CDMX con 173.6% en el último cuatrimestre frente a 2024. Este delito se convirtió en el flagelo diario de pequeños negocios, taxistas y transportistas.
Dos casos se volvieron emblemáticos: Irma Hernández Cruz, taxista de 62 años en Veracruz, fue secuestrada y torturada hasta la muerte por negarse a pagar cuotas. También Bernardo Bravo Manríquez, líder limonero de Apatzingán, fue asesinado tras resistirse a la extorsión.
9. Masacres y Violencia en Guanajuato
La guerra entre el CJNG y el Cártel de Santa Rosa de Lima, aliado ahora con el Cártel del Golfo y una facción de Sinaloa, mantuvo a Guanajuato como uno de los estados más peligrosos. Se registraron 267 atrocidades en el primer semestre.
El 16 de diciembre, un ataque armado en San Luis de Jánamo dejó cuatro personas muertas y dos lesionadas, incluyendo un menor de 17 años. Estados Unidos sancionó al Cártel de Santa Rosa de Lima señalando que reclutó exmilitares y paramilitares colombianos para operar en el estado.
10. Feminicidios: Más de 5,000 Mujeres Asesinadas
En 2025 más de cinco mil mujeres fueron asesinadas de forma violenta en México, pero solo 597 se tipificaron como feminicidio por las fiscalías estatales, evidenciando falta de perspectiva de género en las investigaciones. El asesinato de mujeres con crueldad extrema representó un promedio de 8.3 casos por semana.
El Balance de un Año Violento
| Indicador | Cifra 2025 |
| Atrocidades (primer semestre) | 2,517 |
| Promedio diario de atrocidades | 14 |
| Desapariciones acumuladas | 131,000+ |
| Funcionarios asesinados | 56 (incluyendo 7 alcaldes) |
| Mujeres asesinadas | 5,000+ |
| Feminicidios tipificados | 597 |
| Fosas encontradas (mensual) | 26 |
Aunque el gobierno de Claudia Sheinbaum celebró una reducción del 34% en homicidios desde 2018, expertos cuestionan la validez de estos datos mientras otros delitos contra la vida subieron 82% y las desapariciones aumentaron 12%.
Los eventos de 2025 demostraron que la violencia en México no solo persiste, sino que se ha transformado. Los grupos criminales utilizan métodos cada vez más sofisticados y brutales, desde coches bomba hasta campos de exterminio, mientras el Estado enfrenta severas limitaciones para garantizar la seguridad de la población.
La crisis de desapariciones, el asesinato sistemático de funcionarios públicos, la extorsión generalizada y la impunidad siguen siendo los grandes desafíos para 2026. Las familias de las víctimas, los colectivos de búsqueda y las organizaciones de la sociedad civil continúan siendo quienes más visibilidad dan a esta tragedia nacional, muchas veces ante la indiferencia o negligencia de las autoridades.
Detrás de cada cifra y cada evento hay personas, familias destrozadas y comunidades enteras atravesadas por el dolor. No podemos permitir que la normalización de esta violencia nos haga perder nuestra capacidad de indignación y nuestra exigencia de justicia.