En los últimos años, la tecnología para la salud femenina, o femtech, ha experimentado un auge astronómico en todo el mundo. El término fue acuñado en 2016 por Ida Tin, cofundadora y ex CEO de la aplicación de seguimiento menstrual Clue, y hace referencia a la tecnología que aborda problemas de salud que solo o de manera desproporcionada afectan a las mujeres. Como resultado de la gran brecha en salud de género, que vio a las mujeres excluidas de los ensayos clínicos hasta la década de 1990, las fundadoras de todo el mundo están tomando cartas en el asunto y desarrollando soluciones tecnológicas innovadoras para mejorar la salud femenina.
Desde etapas de la vida más conocidas, como la menopausia, y problemas más comunes como la fertilidad, hasta condiciones menos representadas como el prolapso o la perimenopausia, las soluciones emergentes de femtech están cambiando la forma en que pensamos sobre la salud de las mujeres. En la última década, este cambio ha resultado no solo en un mejor tratamiento de la salud femenina, sino también en un aumento de la financiación otorgada a fundadoras (aunque este esfuerzo aún está en curso), pero igualmente en un ecosistema de startups mucho más diverso. Los principales centros tecnológicos como Londres, Nueva York y Silicon Valley siguen siendo influyentes; sin embargo, el auge de las soluciones tecnológicas ha dado lugar a la aparición de nuevos polos de innovación, creando nuevos centros de startups que ofrecen oportunidades que de otro modo no tendrían.
Para México, aunque ya es reconocido a nivel mundial como una opción fructífera para fundadores de startups que desarrollan soluciones innovadoras en el sector tecnológico, la incorporación del femtech tiene el potencial de posicionar al país como un centro líder de femtech en los próximos años. En nuestra experiencia desarrollando Hormony (Prelude Health), una solución de salud femenina diseñada específicamente para apoyar a las mujeres en su recorrido por la perimenopausia, nuestra presencia en México ha sido no solo formativa, sino fundamental para el éxito de nuestro recorrido hasta ahora.
A medida que la IA sigue demostrando su eficacia en los diversos subsectores de la tecnología, la atención médica y la salud de las mujeres, tiene aplicaciones para mejorar todo, desde diagnósticos hasta el apoyo a la salud mental. Como resultado, al igual que en la biotecnología y el healthtech, muchas soluciones femtech incorporan IA. Esto incluye a Hormony, donde estamos implementando tecnología de IA para optimizar nuestra aplicación móvil para mejorar la experiencia del usuario (UX) y personalizar de manera hiperindividualizada las recomendaciones de nuestro equipo de expertos médicos. Si bien las muchas aplicaciones de la IA están bien documentadas y ya en uso por fundadores de todo el mundo, México se encuentra en una posición única debido a su sólida infraestructura tecnológica.
Con un ranking de tercer lugar en el Índice de Preparación de Tecnología e IA y Gobierno de la UNESCO en 2023, el sector de IA de México está ganando atractivo tanto para inversores como para fundadores. A esto se suma el hecho de que la industria de IA de México es un contribuyente principal a su economía: para 2030, con una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) del 28.5%, su volumen de mercado alcanzará los 12,5 mil millones de dólares. Y la amplitud del sector es asombrosa, con desarrollos en robótica, IA generativa, aprendizaje automático, visión por computadora, LM y NLP. Con un sexto lugar en investigaciones académicas relacionadas con la IA según la UNESCO, la posibilidad de colaborar con las principales instituciones tecnológicas del país es una mina de oro para los fundadores. Actualmente hay más de 200 startups impulsadas por IA en el país, lo que demuestra su potencial para las fundadoras que trabajan en el sector de la tecnología para la salud femenina.
Dicho esto, ciertamente hay obstáculos que las fundadoras deben superar para crear un panorama que las apoye y permita su crecimiento comercial. Las mujeres representan un tercio de las emprendedoras en México y, sin embargo, al igual que en muchos otros países, enfrentan dificultades para obtener inversión para sus negocios. Sin embargo, la naturaleza de elegir una carrera de emprendimiento es una misión de resiliencia de toda la vida, confiando en la creencia inquebrantable de que tu innovación será exitosa, a pesar de las barreras que puedas enfrentar. Existe un riesgo inherente en las iniciativas startup, particularmente dentro del femtech, ya que las oportunidades de financiación siguen siendo escasas. Sin embargo, como hemos visto en los últimos años, esto está comenzando a cambiar, con el femtech que se espera crezca a 130 mil millones de dólares para 2030, según Statista. Solo en 2024, vimos emerger los primeros dos unicornios de femtech: Flo Health y Maven. Mientras que Estados Unidos ostenta el título de la mayor inversión en femtech hasta la fecha, la proximidad de México y sus fuertes capacidades técnicas lo convierten en un lugar privilegiado para los fundadores que buscan expandirse hacia Estados Unidos y recaudar fondos.
Mientras tanto, en México, se está reconociendo cada vez más la necesidad de facilitar el crecimiento de las emprendedoras mexicanas. Por ejemplo, en 2019, la Fundación Cherie Blair para Mujeres y Value for Women, apoyadas por la Fundación ExxonMobil, realizaron un estudio nacional, “Understanding How to Unleash the Potential of Women Entrepreneurs in Mexico”. El estudio fue parte de la iniciativa Road to Growth de la Fundación Cherie Blair y la Fundación ExxonMobil, que proporciona apoyo en gestión empresarial y preparación para inversores a 500 mujeres emprendedoras a través de una combinación de formación presencial y en línea. Igualmente, existen varios fondos de capital de riesgo que apoyan activamente a las fundadoras, como Amplifica Capital y New Ventures Capital. Esto es una prueba de que, aunque las fundadoras enfrentan dificultades para hacer crecer negocios sostenibles, hay un apoyo global creciente para asegurar que se conviertan en una parte activa de la economía.
Finalmente, e integral a nuestra propia misión en Hormony, a diferencia de muchos otros sectores, el femtech se basa en y fomenta la colaboración. Al construir sus redes, las fundadoras tienen el beneficio único de acceder a fuentes de experiencia, conocimiento y saberes para ayudarles a avanzar en su trabajo y en el trabajo de las futuras fundadoras. Esto es prevalente en México, y como empresa, lo hemos experimentado por nosotros mismos. Desde el lanzamiento de FemTech MX para apoyar a las fundadoras en asociación con uno de los principales grupos de VC de México enfocados en innovación, hasta la colaboración con la universidad TEC de Monterrey en grupos focales e investigación, y trabajando con la empresa de femtech Sin Reglas para optimizar nuestra oferta, nuestros esfuerzos colaborativos en México han sido fundamentales para nuestro crecimiento. Debido al vasto potencial de colaboración con corporaciones, inversores e instituciones, México puede proporcionar a las fundadoras la red que necesitan para lanzar sus innovaciones.
A medida que el panorama de startups sigue avanzando en México, esta es la oportunidad perfecta para que las fundadoras aprovechen. Desde una infraestructura robusta y capacidades técnicas hasta colaboración y apoyo, México está subiendo en el ranking tecnológico, y no solo cuando se trata de IA. Con el sector femtech en su trayectoria de crecimiento, en los próximos años veremos surgir nuevos centros de startups en diferentes territorios. Y debido a su proximidad con Estados Unidos y todo lo que tiene para ofrecer, predigo que México será un jugador líder en esta evolución del panorama femtech.